En primer lugar debemos saber que el azúcar es dañina tanto para los adultos como para los niños y bebés, el consumo de azúcar a lo largo de cada día debe ser moderado, ya que en exceso puede ser perjudicial para nuestra salud y causarnos enfermedades como diabetes, obesidad y otras enfermedades cardiovasculares.
Los adultos podemos controlar nuestros impulsos, pero a un bebé tenemos que enseñarle desde el principio a limitar el consumo de azúcar. Debemos tener claro que el azúcar NO es necesaria para nadie.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) nos advierte del peligro al consumir excesivamente azúcar. En el caso de los niños el consejo de la OMS es no sobrepasar los 37 gramos diarios. Esto equivale más o menos a 7 cucharaditas de azúcar diarias.
El consumo de azúcar es cada vez más común, frecuente y excesivo. El problema es que de no tener cuidado podemos consumirla fácilmente en exceso pues está en casi todos los productos comerciales (Yogurt, galletas, cereales, pan, leches de formula, refrescos, jugos, embutidos, incluso en la pasta de dientes).
Muchas veces nos es difícil detectar el azúcar añadido pues no siempre está en la lista de ingredientes como “azúcar” , estén alerta ante cualquier forma de azúcar la cual pueden encontrar como: jarabe de maíz de alta fructosa, concentrado de zumo de fruta, sacarosa, glucosa, dextrosa, jugo de caña, malta, melazas, lactosa, miel, etil maltol y maltodextrina.
Los niños inconscientemente se están volviendo adictos, quieren más y más cada vez, ya que se vuelve menos satisfactorio y perciben cada vez menos el sabor dulce. Perjudicando la calidad de su alimentación al dejar de comer frutas y verduras, lo que contribuye a un consumo excesivo de calorías y al consecuente aumento de peso.
El aumento de peso es la base de otras enfermedades de un mal estilo de vida, como la diabetes tipo 2 (que ya me ha tocado ver en niños de 12 años), presión arterial alta, colesterol y triglicéridos elevado. El azúcar no solo nos afecta físicamente, sino que también afecta al cerebro, sistema nervioso y causa adicción. Es tanto su efecto que se recomienda evitar por completo su consumo en niños que sufren de ADHD, Asperger y Autismo.
Por si fuera poco, el azúcar es el alimento del hongo candida albicans, que segrega toxinas e influye en el desarrollo normal (Si se tienen infecciones recurrentes de Cándida suprime el azúcar por completo). También compromete la capacidad del cuerpo para combatir la enfermedad, esto quiere decir que si tus niños comen azúcar su sistema inmune estará deprimido durante unas 5 horas haciéndolos más susceptibles a infecciones. (Lo cual me parece terrible ya que si van a una fiesta y toman un dulce, refresco o pastel al llegar, su cuerpo quedara a disposición de cualquier patógeno que encuentren entre tanto niño y muy probablemente se enfermen).
Así que cada vez son más comunes los niños que enferman con frecuencia, que padecen enfermedades crónico degenerativas, niños cansados y con sobrepeso.
Mi sugerencia es evitar los dulces, jugos, refrescos, galletas, pasteles y productos envasados lo más que puedan, buscar opciones saludables para comer que no contengan azúcar añadida y únicamente de vez en cuando dejar a los niños consumir productos que sabemos son altos en azúcar.
Porque nuestros niños tengan un HealthyFuture…
Con cariño
Yemi