Aspartame (E-951) un endulzante bajo sospecha
El aspartame es un edulcorante artificial no calórico, se encuentra en prácticamente todos los alimentos procesados desde refrescos hasta medicamentos. A pesar de su “seguridad oficial” siguen saliendo estudios que relacionan su consumo con el aumento de problemas de salud, se asocian más de 90 síntomas con el uso continuo de este endulzante , entre los cuales están : migrañas, mareos, náusea, fatiga, taquicardia, insomnio, dificultades para respirar,dolores en las articulaciones, inflamación cerebral e incluso convulsiones. Ni qué decir de las enfermedades crónicas ligadas a su consumo: problemas renales, tumores cerebrales, esclerosis múltiple, epilepsia, fatiga crónica, enfermedad de Parkinson, Alzheimer, retardo mental, linfoma, defectos de nacimiento y fibromialgia.
Legalmente la cantidad estipulada como segura aprobada en 1980 es 40mg por kilo de peso. Si un refresco light contiene entre 100 y 150mg hay que beber muchos litros para pasar de la cantidad diaria recomendada, el problema es que no tenemos la seguridad de que esas cantidades sean realmente seguras y aún menos si los estudios en que se han basado para averiguar ese límite “seguro” estaban financiados por la propia industria interesada.
Por si fuera poco ya no son sólo algunos los productos que contienen aspartame sino que ha sido tanto el éxito que hay una cantidad inmensa de productos que lo contienen y el problema radica en que si paso todo el día comiendo productos light o hechos con aspartame ya no es tan difícil llegar a los limites establecidos como seguros.
Todo en exceso termina por ser malo y el aspartame no es la excepción, yo te sugiero revisar etiquetas, reducir el consumo de los productos que lo contienen y buscar alternativas para endulzar. No es tan difícil hacer el cambio sólo hay que buscar alternativas, te recomiendo algunos de los endulzantes que he probado (Todos los encontré en el Supermercado) : Super Life, Svetia, Narevia o Truvia.
Recuerda que mientras más natural es mejor.